Estos cinco anillos: azul, amarillo, verde, rojo y negro; representan las cinco partes del mundo unidas en adelante al Olimpismo y prestas a aceptar fecundas rivalidades. Además, los seis colores (comprendido el fondo blanco) y combinados, representan los colores de todas las naciones sin excepción. El azul y amarillo de Suecia, el azul y blanco de Grecia, los tricolores francés, inglés y americano, alemán, belga, italiano y húngaro; el amarillo y rojo de España, se acercan a las innovaciones brasileña o australiana, con el viejo Japón y la joven China. He aquí verdaderamente un emblema internacional (Pierre de Coubertin, 1913)